POLEN GRANULADO 100g

Puro polen agroecológico de las Sierras Chicas de Córdoba. 

El polen de abeja es considerado un superalimento por sus múltiples beneficios nutricionales y para la salud. Algunos de los principales beneficios de comer polen de abeja son:

Fuente de proteínas: El polen de abeja es rico en proteínas, lo que lo convierte en una fuente ideal para vegetarianos y veganos.

Rico en vitaminas y minerales: El polen de abeja es rico en vitaminas B, C, D y E, así como en minerales como hierro, zinc y calcio.

Antioxidantes: El polen de abeja contiene una gran cantidad de antioxidantes, que ayudan a proteger las células del cuerpo de los daños causados por los radicales libres.

Mejora la función inmunológica: El polen de abeja puede mejorar la función inmunológica, ya que contiene compuestos que estimulan la producción de anticuerpos y fortalecen el sistema inmunológico.

Alivia los síntomas del asma y las alergias: Algunas investigaciones sugieren que el polen de abeja puede reducir los síntomas del asma y las alergias.

Mejora la salud cardiovascular: El polen de abeja puede reducir el colesterol y la presión arterial, lo que lo convierte en un alimento beneficioso para la salud cardiovascular.

Aumenta la energía y la resistencia: El polen de abeja contiene una gran cantidad de nutrientes y compuestos energéticos, que pueden ayudar a aumentar la energía y la resistencia física.

Es importante tener en cuenta que algunas personas pueden ser alérgicas al polen de abeja, por lo que es recomendable hablar con un médico o un nutricionista antes de incorporarlo a la dieta. Además de lo importante de cosnumir polen de abeja de alta calidad y de fuentes confiables para asegurarse de que sea seguro y efectivo. 

COMO SE CONSUME

Tanto si el polen es fresco como seco, se recomienda tomar el polen de abeja antes del desayuno. Se puede consumir directamente del envase, molido o acompañando otros alimentos. Con leche, café, zumos, batidos, yogures, cuajadas, infusiones…

Para aprovechar los beneficios del Polen, la dosis normal de consumo de polen para adultos es de unos 20 gramos al día, una cucharada sopera.